¿Sabias por qué ESTAR TENIENTE es hacerse el sordo o estarlo de verdad?
Aunque actualmente se dice que está teniente el que no oye, en el origen se aplicaba la expresión al que no quería oír.
La expresión es de origen militar y se aplica a aquél que opta por hacerse el sordo frente a las demandas ajenas o que afirma no haber entendido bien lo que se le pedía.
Ocurre que los suboficiales y los oficiales de baja graduación —los tenientes, por antonomasia— son los encargados del trato con la tropa en los cuarteles y, por lo tanto, los encargados de recibir sus reclamaciones, peticiones de permisos o favores, planteamiento de problemas, quejas…
El teniente, nada interesado en todo este discurso, oye pero no escucha, simplemente cumple con la obligación de atender a la tropa, pero luego hace caso omiso de todo lo oído pues no ha puesto la menor atención al discurso del soldado.
Por ello está teniente no quien es sordo, sino quien se lo hace. Aunque se aplique la expresión indistintamente a uno y otro caso.